El mejor atardecer...el de Uyuni

Después de una noche muy fría, pasamos toda la mañana disfrutando del sol caminando por la feria que justo se hace los jueves. Almorzamos una típica comida en el mercado y salimos en excursión al Salar. Toda una inmensidad de sal, tan increible que se hace difícil ponerlo en palabras. Pasamos la tarde en la tranquilidad del Hotel de Sal junto a Jessi, la española buena onda que se integró al grupo de andaencontrarlas...y tomando mates, escribiendo el diario llegó la puesta de sol tan esperada por todos los que en el Hotel nos alojábamos. Sacamos muchísimas fotos divertidas y jugamos como niñas otra vez!!
La cena fue servida apenas empezaron a salir las primeras estrellas y a la luz de las velas, ya que no hay electricidad...y por supuesto un menú típicamente del lugar, sopa de verduras, pollo con quinoa y un té bien caliente con chocolates antes de ir a la cama.
A la mañana siguiente fuimos despertadas tambien con un excelente desayuno y mientras esparabamos que nos fueran a buscar conocimos a un loco podólogo francés que andaba en su speed-sayling...una vela como la de surf pero con rueditas...y por supuesto que las chicas se animaron... no con mucho éxito... pero bien!!
Por la tarde recorrimos la Isla del Pescado, almorzamos ahí y después de sacar algunas fotos ingeniosas,que después compartiremos, dejabamos el Salar para volver a Uyuni. De camino pasamos por el cementerio de trenes y por fin llegamos, con el tiempo justo para salir hacia Sucre.